Dos senadoras republicanas se han opuesto públicamente a votar a un nuevo candidato a la Corte Suprema antes de la elección del 3 de noviembre, tras el fallecimiento de la magistrada Ruth Bader Ginsburg.
Susan Collins, republicana por Maine, fue la primera en romper filas el sábado declarando que creía que reemplazar a Ginsburg debería ser una decisión del presidente electo el 3 de noviembre.
"Debido a la cercanía de la elección presidencial, no creo que el Senado deba votar por un nominado antes de la votación. La decisión de un juez vitalicio para la Corte Suprema debe tomarla quien resulte electo el 3 de noviembre", declaró la política.
La senadora Lisa Murkowski, republicana por Alaska, se convirtió este domingo en la segunda senadora republicana en oponerse públicamente.
"Durante semanas he dicho que no apoyaría ocupar una vacante en la Corte Suprema tan cerca de las elecciones. Lamentablemente, lo que entonces era hipotético es ahora una realidad, pero mi posición no ha cambiado", afirmó Murkowski en un comunicado.
"No apoyé aceptar una nominación ocho meses antes de las elecciones de 2016 para cubrir la vacante del fallecido juez [Antonin] Scalia. Ahora estamos aún más cerca de las elecciones de 2020, a menos de dos meses, y creo que se debe aplicar el mismo estándar", añadió.
La oposición de Murkowski llega cuando Trump se comprometió este fin de semana a ocupar rápidamente el escaño vacante de la Corte Suprema y nominar a una mujer para ocuparlo.
Los republicanos tienen la mayoría en el Senado, de modo que solo necesitan 51 votos para confirmar a un nuevo magistrado en la Corte Suprema, una vez sea nominado de manera formal (el presidente Trump dijo el sábado que nominará a una mujer y lo anunciará esta semana).
Hay 53 senadores republicanos, y de haber un empate, el vicepresidente Mike Pence lo rompería con su voto. Con la oposición de Murkoswki y Collins, el futuro de la votación para un reemplazo antes del 3 de noviembre podría tambalearse si dos senadores republicanos más (cuatro en total), rompen la disciplina del partido.
El líder de la mayoría del Senado, Mitch McConnell, republicano por Kentycky, prometió convocar una votación por el nominado de Trump, pero los demócratas respondieron que los republicanos deben seguir el precedente que los legisladores republicanos establecieron en 2016 al negarse a considerar una elección de la Corte Suprema en el período previo a las elecciones.