El presidente, Donald Trump, y su hija y asesora Ivanka, publicaron sendos tuit promoviendo la marca hispana de productos alimenticios Goya, que ha sido fuertemente criticada luego que su presidente Robert Unanue llenara de elogios al presidente.
"¿Se da cuenta de quién es la gente que compra sus productos?", dijo Lorgia Ortega, quien emigró de El Salvador en 1974 y ahora vive en Los Ángeles, según recogió The Associated Press el domingo pasado. "Este presidente nos ha insultado tanto", agregó.
Trump escribió este miércoles que "a Goya le está yendo GENIAL. La maquinaria de la Izquierda Radical fracasó, la gente está comprando como loca".
Además, publicó una foto posando con varios productos Goya en su cuenta de Instagram.
Esto en respuesta al boicot contra Goya que surgió en redes sociales luego que Unuane dijera que "somos realmente bendecidos de tener un líder como el presidente Trump" durante la firma de una orden ejecutiva para promover oportunidades laborales y educacionales para latinos.
La campaña con los hashtag #BoycottGoya, #GoyaFoods y #Goyaway llama a no comprar productos de una compañía que glorifica a un presidente que ha insultado a los latinos en repetidas ocasiones, en particular a los mexicanos.
También el martes estuvo promoviendo la marca Goya su hija Ivanka, una de las principales asesoras en la Casa Blanca. Ivanka subió una foto en Twitter en la que posa como modelo con una lata de frijoles Goya. Su mensaje dice, en español, el lema de la compañía hispana: "Si es Goya, tiene que ser bueno".
¿Por qué importa esto?
Este tuit, y el del presidente, parecen haber violado una norma ética que establece que los empleados del poder ejecutivo no pueden utilizar su cargo para promocionar un producto.
La ley establece que un empleado "no utilizará su cargo público para su propio beneficio privado, para la promoción de ningún producto, servicio o empresa".
"Está a punto de que le caigan encima por una violación de las reglas éticas que le aplican como empleada de la Casa Blanca", tuiteó la asesora republicana Liz Mair.
La Casa Blanca reaccionó este miércoles: la vocera Carolina Hurley dijo que "solo los medios de comunicación y la cultura de 'cancelar' a la gente criticarían a Ivanka por mostrar su apoyo personal a una compañía que ha sido injustamente burlada, boicoteada y ridiculizada por apoyar a esta administración, una que siempre ha luchado y ha entregado resultados para la comunidad hispana. Ivanka está orgullosa de este fuerte negocio de propiedad hispana con profundas raíces en Estados Unidos y tiene todo el derecho de expresar su apoyo personal".
Un contra-boicot
Pero los partidarios del presidente reaccionaron con un llamado a romper el boicot, comprando los productos de la empresa de manera masiva. Una de estas iniciativas por parte de un hombre en Virginia ha recaudado cerca de 200,000 dólares para comprar estos alimentos y donarlos a la beneficencia, según reportó The Miami Herald.
Las reacciones al tuit de Ivanka Trump eran las de esperarse.
"Si es Trump, tiene que ser corrupto", tuiteó la representante por Nueva York de origen puertorriqueño, Alexandria Ocasio Cortez.
"Cuándo una lata de frijoles vale más que la vida de un menor no acompañado", dice un usuario de Twitter. "Niños en jaulas en las fronteras, no es bueno", agrega la analista política Ana Navarro-Cárdenas.
Muchos latinos sienten que Trump ha deshumanizado y atacado a los inmigrantes con fines políticos desde que lanzó su campaña presidencial en 2016, cuando dijo que los mexicanos recién llegados eran delincuentes y violadores.
"Es vergonzoso y espantoso que el presidente de Goya elogie al presidente más antilatino en la historia de nuestro país", dijo Nathalie Rayes, directora ejecutiva de Latino Victory Fund.
[Boicot a Goya: latinos explican por qué se sienten ofendidos e indignados]
El centro para inmigrantes Raíces, con base en Texas, escribió en Twitter que los fríjoles negros en lata de Goya “ni siquiera son tan buenos". "Por lo visto sus opiniones y políticas son peores”, añadió.
El escritor gastronómico del sur de California Bill Esparza dijo en Twitter que había hecho un "control de despensa" rápido para asegurarse de que no hubiera productos Goya en su hogar. "Todo limpio", escribió.
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